Cuando faltan setenta días para las elecciones, el racismo parece ser uno de los temas de campaña y los dos candidatos se acusan mutuamente
Silvia Pisani / LA NACION
"Ya saben, Hillary Clinton es una fanática intolerante", disparó Donald Trump. El republicano, que lleva días tratando de suavizar la imagen de racista que de él tienen muchos norteamericanos, encontró una curiosa estrategia al atribuir al otro la misma carga que a él se le atribuye.
"Es como si quisiera decir que todo el mundo en este país es racista cuando, en realidad, el que ha tenido expresiones y actitudes de ese tipo es él", dijo a LA NACION John Ryan, analista político de la consultora Strategy Group, con sede en esta ciudad.
"Hillary Clinton needs to address the racist undertones of her 2008 campaign." #FlashbackFridaypic.twitter.com/MJQp0rcnzH&- Donald J. Trump (@realDonaldTrump) August 26, 2016
De hecho, los primeros spots de campaña que ha soltado Trump van en ese sentido. "Los demócratas son todos iguales. Gobiernan en ciudades donde los negros viven en la pobreza, pero cuando se les señala esa realidad, salen con el grito de «racista. racista», dijo. Hillary Clinton no se quedó atrás. Anoche, en un largo discurso, se encargó se mostrar a Trump como la encarnación viviente de una corriente de pensamiento a la que denominó como "racismo emergente". Sostuvo además que esa corriente está avanzando en el Partido Republicano y que eso es algo para lamentar. No deja de ser curioso que las dos figuras que aspiran a suceder al primer presidente no blanco en la historia de los Estados Unidos se enzarcen en este tipo de disputa. "Por momentos, podría pensarse que el legado de la primera presidencia no blanca en país es nulo en materia de racismo", conjeturó Ryan. La estrategia de Trump es atacar al otro justamente donde a él le duele. Los sondeos coinciden en darle una cuota mínima de voto hispano y negro. Algo que él, sin embargo, pone en duda. "Yo sé que los negros y los latinos van a votarme porque, en definitiva, yo les puedo dar una oportunidad", desafió. La expresión va en línea con la invitación abierta que hizo a ese voto en un reciente mitin. "Ustedes ya viven en la pobreza. ¿Qué más tienen que perder? ¿Qué podrían perder? Vótenme, porque yo puedo mejorar la situación", aseguró.
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